Hablar de gigantes como Honda, Yamaha, Suzuki y Kawasaki es sinónimo de un sin fin de adjetivos que podrían explicar la calidad y respaldo que poseen estas marcas. Que se unan los cuatro gigantes japonesas nunca puede resultar malo, y en este caso es en beneficio del desarrollo de las motos eléctricas.
Ya habíamos hablado hace algunos días de los beneficios que presentan las baterías intercambiables universales para el micro mundo de las motos eléctricas, y que 4 empresas históricas de las motos se metan a evolucionar este aspecto es un indicio de que el futuro, sin lugar a dudas, será eléctrico y es inminente.
Baterías intercambiables
Hace poco te contamos sobre una firma taiwanesa ofrece un sistema revolucionario que podría ponerle el fin a las recargas como las conocemos: La empresa Gogoro, que lanzó al mundo el primer prototipo de batería en estado sólido intercambiable para motos eléctricas, estaciones fijas que permitan intercambiar baterías universales de manera gratuita.
Este tipo de baterías sólidas ofrece, en principio, tres ventajas para los usuarios de motos eléctricas: mayor autonomía, mayor seguridad y una carga aún más rápida que las baterías convencionales que conocemos hasta hoy. Gogoro estima que sus nuevas baterías de estado sólido aumentarían la capacidad de las baterías de litio actuales en un 140 % o más, pasando de 1,7 kWh a 2,5 kWh.
La unión de las japonesas
En 2019, Honda, Yamaha, Suzuki y Kawasaki, habían anunciado el inicio de un proyecto en conjunto que tenía como objetivo estandarizar la recarga de sus motos eléctricas y ahora, a través de un comunicado, se anuncia la empresa creada para gestionar el sistema: se trata de Gachaco, la nueva empresa que entró en vigencia desde viernes 1 de abril de 2022 y ofrecerá un sistema de “batería como servicio”.
Si bien la iniciativa fue de las marcas, hay un quinto involucrado que, de hecho, es el mayor accionista de Gachaco. Hablamos de ENEOS, un conglomerado japonés de petróleo y metales que tiene una participación del 51 por ciento en la empresa recientemente creada.
El intercambio de baterías tiene un gran potencial y es una tecnología ideal para las motos eléctricas debido a su reducido tamaño en comparación con las que utilizan los coches impulsados por electricidad, y la facilidad para retirarlas y reinstalarlas.
Siempre que las estaciones de intercambio de baterías estén disponibles, esta capacidad de «frenar, cambiar y seguir» significa que ya no es necesario competir con las motos de combustión. Lo que se necesita es que esas paradas no sean demasiado frecuentes, y siempre que el sistema sea perfectamente conveniente, pero resuelven el inconveniente de la acortada autonomía que presentaban algunos modelos sin la necesidad de utilizar baterías aparatosas y pesadas que terminen mermando el rendimiento del motor.
