Tamburini T12 Massimo
Hoy os traemos el legado del gran ingeniero italiano, Massimo Tamburini. Se trata de la Tamburini T12 Massimo, bautizada así por el hijo del mítico diseñador e ingeniero italiano. Se trata del último modelo en el que estuvo trabajando antes de fallecer hacer ya dos años, en Abril de 2014 y que su familia a rescatado en forma de homenaje.
Tamburini T12 Massimo
Massimo Tamburini, es conocido como el creador de la Ducati 916 y por haber levantado MV Agusta con el modelo F4, cuando tan mal lo estaba pasando la marca italiana. Al salir de ella en 2008, firmó un contrato en el que le obligaban a no poder trabajar en el mercado de la moto durante varios años. Pero en 2012 se puso manos a la obra para diseñar esta preciosidad que no tiene parangón.
Se trata de una moto concebida por y para el circuito. No tuvo limitaciones en su diseño, ni de presupuesto ni de homologaciones, ya que su idea era construir la moto de circuito perfecta. La Tamburi T12 Massimo, lleva lo mas selecto que se puede poner hoy en día a una moto. Desde frenos Brembo GP, escape Akrapovic y un largo etcétera de accesorios de la mejor calidad.
Pero su impronta no viene por usar lo mejor de cada fabricante, en ella va lo mejor de su trabajo. Con chasis multitubular de acero al cromo, que es capaz de modificar su rigidez lateral sin variar ningún elemento. Chasis que patentó el mismo Tamburini. Viene equipada con un motor de cuatro cilindros derivado de la BMW S1000RR que desarrolla 230 CV de potencia y todo ella para un peso de solo 154 kilos. Una bestia de circuito sin parangón.
Con multitud de piezas en carbono como el deposito y el carenado o el basculante de magnesio, estamos seguros que romperá más de un corazón de aguerridos pilotos. La idea de fabricarla y ponerla a la venta, ha sido de su hijo, como homenaje a su padre. Ha creado la compañía Massimo Tamburini SRL, para poder llevar a la luz, el último trabajo del magnifico ingeniero y como no, poner su nombre a su última criatura.
Por desgracia, la Tamburini T12 Massimo, está solo al alcance de unos pocos, porque su precio es más que prohibitivo, alrededor de 300.000 euros. Una moto para coleccionistas al igual que podría ser la Honda RCV213 V-S, aunque obviamente la moto del fabricante japonés no llega al nivel de exquisitez ni de diseño del fabricante italiano.